Es difícil definir al Dr. Loucel. Un hombre que dedicó su vida a su proyecto: Universidad Tecnológica de El Salvador, la Utec. Un sueño que se ha materializado en 45 años de trayectoria, en más de veinte inmuebles, en miles de estudiantes, en miles de graduados, en cientos de empleos.

El Dr. Loucel fue la representación del éxito empresarial, pero también del trabajo constante, de la entrega, de la visión. Hoy, para los que le conocimos y admiramos, nos deja con gran pesar. Ha partido un gran hombre, un gran visionario, un padre de la educación en El Salvador porque adondequiera que vayamos siempre encontraremos a un estudiante o a un graduado de la Utec y eso es lo más grande que nos dejó el Dr. Loucel. ¡Gracias, doctor! ¡Vuele alto como el águila, que es el emblema de su sueño! “Suba hasta el cielo, tu fe, tu sensibilidad. Una plegaria más allá, por tu visión”.